Entrevista a For a Better Future: Emprendimiento Social Juvenil

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Rebeca Herer, una chica de 14 años, forma parte de For a Better Future, un grupo de jóvenes que se autoorganizan para crear manualidades como marcadores de página o pulseras, venderlas en sus barrios y enviar el beneficio a un orfanato en Uganda. Rebeca nos habla de cómo surgió la iniciativa, de cuál es la narrativa sobre el continente en las escuelas, de lo que cree que debería cambiar en el actual sistema educativo eurocéntrico y, sobre todo, de lo importante que es el emprendimiento social juvenil.

¡Hola, Rebeca! Cuéntanos un poco de ti, y sobre en lo que consiste For a Better Future.

Mi nombre es Rebeca Herer, tengo 14 años, vivo en Madrid, y me encanta la música -y por eso toco el violonchelo-. A pesar de que pase todo el tiempo estudiando y tocando, en mis huecos libres siempre intento dedicarme al proyecto. For a Better Future es una rama de un orfanato que hay en Uganda. Nosotros somos niños y niñas de entre 12 y 14 años, que lo que queremos es invertir nuestro tiempo en algo que podamos compartir con el resto de niños en Uganda. Lo que hacemos es realizar productos artesanales como marcapáginas o pulseras que, aunque no sea gran cosa, nos dan un poco de dinero que después donamos al orfanato.

¿Cómo nació For a Better Future?

Una de las integrantes del equipo conocía este orfanato, y, antes, intentaba vender en España los productos artesanales que hacían los niños allí. Poco a poco nos fuimos uniendo más personas y un día dijimos: “¿Y por qué no aprovechar lo que nosotros podemos hacer y también intentar ayudar de forma creativa?”. De alguna manera, también nos ayudó a manejar lo que sería nuestra primera mini-empresa, y   aprender a la vez que ayudamos.

¿Nos podrías contar un poco más sobre el orfanato?

Se llama Malayaka House y, además de acoger a los niños, los voluntarios también organizan actividades extraescolares variadas para ellos. Me encanta colaborar con este orfanato en concreto, no solo por el hecho de conocerlo desde hace tiempo, sino porque su metodología didáctica enseña a los niños a ser autosuficientes y valerse por sí solos. Y lo hace abarcando más asignaturas, y no únicamente las convencionales para la vida laboral.

De hecho, otro aspecto positivo de su metodología es su énfasis en la educación digital. Pese a que no sea el punto central del proyecto, una de sus extraescolares consiste en enseñar a los niños a utilizar los ordenadores. Allí aprenden a enviar correos electrónicos, a crear sus propios documentos, etc., lo básico. Una vez incluso intercambiamos mensajes y correos electrónicos entre nosotras, las integrantes de For a Better Future, y los niños del orfanato, para comunicarnos y que ellos pudieran vivir, como nosotros lo hacemos, la comunicación por internet.

¿Alguna vez has estado en Uganda? Si no es así, ¿cómo te lo imaginas?

No he estado nunca, pero me apasionaría. Aquí todo está centrado en Europa. Aunque todos seamos humanos, tenemos características que nos hacen diferentes, y hay una infinidad de cosas que no conozco y que me encantaría conocer. Quiero decir, lo que es distinto no sé por qué es distinto, ya que jamás me lo han contado,así que la única manera de conocer y apreciar esas diferencias es yendo allí.

¿Cuál es la narrativa que a ti, con 14 años, te ha llegado sobre África? Antes de unirte al proyecto, ¿qué idea tenías del continente? ¿Qué era lo que escuchabas en la escuela, la televisión, etc? 

Todo lo que yo sabía de África antes es que había niños sin comida a los que se les había de ayudar, casos reales y que no debemos dejar pasar, pero aparte de eso, de todo lo malo, no me han explicado nunca las diferencias de África respecto a nuestro continente en materia de política o cultura. Aspectos que no son ni buenos ni malos, sino que simplemente son así, y que jamás me han enseñado. Lo único que sé de África son sus países y capitales, y todo el resto son noticias fatales. Si lo comparo con Europa, puedo decir que, por poner un ejemplo tonto, en Alemania son típicas las salchichas Bratswurst; sin embargo, de África no puedo decir qué es típico y especial en cada país, porque no lo sé.

¿Cuál crees que debería ser la narrativa de África con respecto a los jóvenes?

Me gustaría que, en el instituto, si por ejemplo estamos estudiando el Renacimiento y otras corrientes, que estas no solo sean de Europa. Cuando damos Historia solo nos centramos en un solo continente. En Geografía tampoco nos enseñan las características sociales de los diferentes países fuera de Occidente, nada más allá de los típicos términos de “desarrollado” y “subdesarrollado”, nada sobre las características de otras sociedades, nada más de lo que es la “sociedad española”.

¿Cómo animarías a los jóvenes como tú a apostar por el emprendimiento social?

Creo que es importante transmitir que cada uno puede aportar con lo que sabe o le gusta hacer. Yo soy chelista, y si me pagasen ahora mismo por tocar, como no necesito el dinero, quizá lo invertiría en algo social. Y no me refiero a donarlo directamente, sino a invertirlo en crear un proyecto mucho más grande y cambiar la sociedad. Como dijo Eduardo Galeano: “Mucha gente pequeña haciendo cosas pequeñas en sitios pequeños puede llegar a cambiar el mundo”. Nosotros, en For a Better Future, no solo somos pequeños de edad, sino también pequeños respecto al resto del mundo; pero si nos juntamos podemos conseguirlo.

Bianca Carrera

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