El 19 de enero de este mismo año, representantes de los dos proclamados ‘legítimos’ gobiernos libios – el respaldado por la comunidad internacional y liderado por Fayez Al-Sarraj, y el encabezado por el comandante Jalifa Haftar, de las fuerzas rebeldes y antiguo miembro del régimen de Muamar al Gadafi – se reunieron en Berlín con motivo de acabar con las tensiones que han ocupado las calles desde la primavera Árabe en 2011.