Existen diversos factores que afectan a la salud y el bienestar de las personas y aumentan el riesgo de sufrir, o ser más vulnerables, a determinadas enfermedades. Entre ellos se encuentran las condiciones del sistema sanitario local y la facilidad para acceder a él, la contaminación, una alimentación escasa o inadecuada y la sobrecarga física debida a trabajos que producen gran desgaste. Todos estos factores se dan frecuentemente entre las personas que viven en situación de pobreza, pero además, a ellos se suman otros riesgos derivados de las condiciones poco adecuadas del lugar en el que habitan.