Quico Germain es un joven de 25 años que vive en Uganda. A los 19, tras participar de diferentes proyectos, decidió terminar el segundo año de estudio, coger una avión a Tanzania sin billete de vuelta y empezar a trabajar como cooperante. Descontento con el proyecto en el acabó, decidió viajar, conocer diferentes iniciativas y terminó en Uganda donde conoció a Deborah, la directora de un orfanato. Poco después fundó la Asociación Petits Detalls, una entidad que escala iniciativas locales para fomentar el desarrollo.