El relato de la dependencia
El 24 de febrero el presidente de Rusia Vladimir Putin, tras acusar a los Estados Unidos (EE.UU) y la OTAN de supuestamente convertir Ucrania en un bastión militar para amenazar a Rusia, y tras diversos intentos fallidos de negociación por parte de diplomáticos europeos, anunció el inicio de una ‘operación militar especial’ en Ucrania. Casi tres meses después de que las tropas rusas cruzaran la frontera e invadieran el país que lleva años estrechando lazos con la Unión Europea (UE), organizaciones internacionales estiman que el impacto del conflicto en África será inmenso. El continente africano en su conjunto solo importa alrededor del 2% de productos agrícolas de origen ruso y ucraniano, pero países del Norte y Este de África, que sí dependen de la importación de cereales, verán mermado el abastecimiento de dichos alimentos debido a la subida de los precios. Por otro lado, Argelia, Nigeria y Níger, que el 16 de febrero firmaron un acuerdo para construir un oleoducto para exportar gas a los mercados europeos, están emergiendo como unos posibles ganadores de este conflicto.
La interpretación en la mayoría de los análisis sobre el papel de África en el conflicto de Ucrania puede catalogarse de simplista, ya que en general posicionan al continente como un actor pasivo. Este discurso ha sido reforzado tanto por medios de comunicación occidentales como por los casos documentados de discriminación en contra de inmigrantes africanos en la frontera de Ucrania con los países de la UE. Las reacciones por parte de los líderes africanos, aunque pocas y descoordinadas, indican que este conflicto geopolítico es una oportunidad que permitirá a algunos países africanos reafirmar su papel en los retos globales.
La crisis en Ucrania eclipsa la cumbre Unión Europea – Unión Africana
La crisis en Ucrania y la retirada de las tropas francesas de Mali eclipsaron la sexta cumbre de la UE y la Unión Africana (UA) organizada el pasado 17 y 18 de febrero en Bruselas y que aseguró 150 mil millones de euros en inversión para África. De hecho, cabe destacar que, entre los 55 cabezas de estado africanos, muchos asistieron a la cumbre con escepticismo, considerando que la distribución de vacunas para el COVID-19 puso en tensión las relaciones entre los dos bloques. Antes de empezar la cumbre, los líderes europeos participaron en una sesión especial para debatir la situación de seguridad en la frontera entre Rusia y Ucrania, un indicio claro de la gravedad de la situación y, a la vez, una señal de que la atención de los líderes europeos podría estar menos centrada en África. Más tarde, una vez las tropas rusas se adentraron hacia la capital Kiev, el presidente de Ucrania Volodymyr Zelenski firmó un decreto para retirar las fuerzas de mantenimiento de paz de ONU en África con el fin de centrar los esfuerzos militares en impedir la invasión, un hecho que contribuyó a la preocupación de que Europa estaba re-centralizando su atención y esfuerzo en el continente.
La invasión de Ucrania tiene lugar en un momento en que los líderes africanos están intentando diversificar sus relaciones económicas y políticas con los actores internacionales para evitar quedarse atrapados en la dinámica de la Guerra Fría y buscar asistencia de otros poderes económicos emergentes. En particular, a lo largo de estos últimos años el continente africano ha fortalecido su relación con China y Rusia. La primera cumbre Rusia – África, que tuvo lugar en 2019, y los nuevos acuerdos militares con Nigeria y Etiopía que la siguieron, son parte de la ambición rusa de posicionar el país entre las potencias globales. De igual modo, es casi imposible entender el mutante orden global sin seguir la creciente presencia económica de China en el continente africano, catalizada por la introducción en 2013 de la Belt and Road Initiative o la Nueva Ruta de la Seda, así como la construcción de su primera base militar en África, ambos motivos de preocupación para la UE. Además de otras explicaciones históricas, este acercamiento influyó claramente en el voto de los países africanos en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) del 2 de marzo. La organización internacional Development Reimagined muestra la distribución de los votos en un diagrama y da a conocer los diversos motivos políticos de los líderes de los diferentes países africanos que influyeron en su dispar respuesta al conflicto. Veintiocho países votaron a favor, diecisiete se abstuvieron y el único país que votó en contra fue Eritrea.
Mediación fuera del continente africano
Analizar las respuestas de los diferentes países africanos fuera del contexto del voto en el CSNU es importante, como lo es también amplificar el papel que juegan estos países en los conflictos que suceden fuera del continente, para evaluar su capacidad de incidencia en la resolución de retos globales. El 22 de febrero, el embajador y representante permanente de Kenia en la ONU, Martin Kimani, pronunció un discurso contundente durante una sesión de emergencia organizada en el CSNU, condenando el imperialismo, apelando al respeto a las leyes internacionales, la soberanía de Ucrania y recordando la fragilidad del multilateralismo. Asimismo, Sudáfrica se abstuvo del voto en el CSNU con el objetivo de poder mediar en el conflicto. Según el presidente Cyril Ramaphosa, la mejor opción para conseguir este objetivo era mantener la neutralidad. Cabe recordar que, junto con China, Sudáfrica forma parte de los BRICS, el grupo de las principales cinco economías emergentes a nivel global. Al igual que Sudáfrica, muchos otros países del continente africano han decidido respetar el principio de no-alineamiento, que es en sí un proceso de gestión de conflictos que proviene de los tiempos de la Guerra Fría y los procesos de independización de los países africanos. El presidente de Senegal y de la UA, Macky Sall, mantuvo una llamada telefónica con Putin el 24 de febrero para negociar un alto el fuego. El mismo día, la UA y la Comisión de la Unión Africana emitieron un comunicado avisando a Rusia y a los actores regionales e internacionales que respetaran imperiosamente las leyes internacionales, la integridad territorial de Ucrania y su soberanía. La organización africana fue más lenta en emitir una denuncia a la discriminación racial de inmigrantes africanos huyendo de la zona, un eco del racismo sufrido por ciudadanos africanos en China al inicio de la pandemia del COVID-19, hecho que también ha puesto a prueba el liderazgo de los dirigentes africanos.
Los mensajes sobre las oportunidades estratégicas del conflicto para el continente fueron más discretas. Sin bien es cierto que los esfuerzos para des-escalar el conflicto entre Rusia y Ucrania han sido protagonizados por poderes occidentales como Francia, Alemania ,Estados Unidos y la UE durante las discusiones bilaterales en la cumbre de la Unión Europea- Unión Africana, la presidenta de Tanzania Samia Suluhu Hassan declaró que las tensiones entre Rusia y Ucrania y la voluntad de la UE de conseguir la autonomía energética estaban creando una oportunidad para acceder al mercado europeo y acelerar la transición energética verde en el continente Africano.
Oportunidades para África en la construcción de una UE más fuerte
El impacto de la invasión de Ucrania en África es un ejemplo más de la interdependencia económica del mundo. Además de acelerar procesos que ya se estaban gestando, como la autonomía energética de Europa y la conversión de la UE en un actor global, el conflicto y su resolución están creando las oportunidades que los líderes africanos necesitan para reafirmar su papel en los debates globales. Puede que las intervenciones de los líderes africanos que obtengan más relevancia sean aquellas que han destacado la contradicción que presentan las acciones impunes de los poderes occidentales, como la invasión de Libia por parte de la OTAN. Por otro lado, sus intervenciones en foros multilaterales presentan un sentimiento de resignación por los cambios de gobierno forzados tras los golpes de estado en Guinea, Mali y Burkina Faso. A pesar de estos hechos, una mayor coordinación de las intervenciones y comunicados por parte de los lideres africanos sería importante para fortalecer su mensaje y posicionarse entre los actores internacionales ante hechos críticos y trascendentales como el conflicto en Ucrania.
Editado por Rocío Ballesta Orta
Referencias
Apiko, P. 2022. Breaking down the EU-AU Summit. European Center for Development Policy Management.
Fabricius, P. 2022. Ukraine war reveals Africa divided, Institute for Security Studies.
France 24. 2019. Lo que dejó la primera cumbre Rusia- áfrica.
Politico. 2022. Live blog: Ukraine crisis and the EU-Africa summit.
Resnick, D. 2022. What does the war in Ukraine mean for Africa?, Brookings.
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