Durante las dos últimas décadas la industria espacial africana ha experimentado un boom en toda regla, dejando atrás los tiempos de carencia de innovación en la materia, contando con países e iniciativas punteros en la nueva carrera por la exploración del cosmos (Giles, 2018). Los casos de Sudáfrica, Nigeria o Etiopía ejemplifican perfectamente el potencial desarrollo que África puede llegar a alcanzar con las nuevas tecnologías espaciales.